Escort Prepago Maria
Isabel
Hola me llamo Maria Isabel Correa, soy una Prepago de Medellin de 26 años, Tengo ojos color café, el cabello castaño y un culo grande, contextura normal de piel blanca lista y dispuesta a servirte en todos tus pensamientos eróticos.
Edad | 22 |
Color de piel | Blanca |
Tamaño de busto | A |
Tamaño de cola | Grande |
Contextura | Normal |
Estatura | 155 CM |
Ubicación | MEDELLIN |
Color de ojos | CAFÉS |
Color de pelo | CASTAÑO |
Idiomas | Español e Inglés básico |
Intereses | noticias, salud, deportes |
Comida | Tipica Antioqueña |
Bebidas | Sidra |
Estilo de ropa | Casual |
Cirugías estéticas | Ninguna |
Servicios adicionales | Parejas,Trios,Anal,Oral Natural,Beso negro,Lluvia blanca,Lluvia dorada,Oral completo,Sado,Squirt |
1 Hora
COP 240,000.00
2 Horas
COP 390,000.00
5 Horas
COP 650,000.00
Medio de Pago:
Llama o escribeme, la pasaremos delicioso (Telegram, Whatsapp) -> (+57)| 300-872-4183|
Más perfiles:
29
nov.
Prepagos Bucaramanga
Hoy quiero contarle dos experiencias sobre como es la vida de una prostituta de un club nocturno en Bucaramanga frente a una chica de masajes eróticos, vamos primero con la chica del club. Me voy de putero una noche y me entrevistó con una de las muchachas que me parece muy atractiva, como me gustan, piernas largas, cabello rubio, aunque teñido y un rostro bonito, pido media de aguardiente y entre chiste y charla le voy sacando cositas y este es su relato.
08
jun.
Prepagos paisas en Bogotá
¡Eh ave maría ome, las paisas! Que aburrido sería todo sin las paisas, en especial en un lugar tan frio y desculado como Bogotá. No es que las prepagos rolas no sean bonitas, pero sin duda las prepagos paisas tienen ese “algo adicional” que logra robar miradas… y erecciones. Encontrar prepagos paisas en Bogotá es posible, ¡incluso están más cerca de lo que piensas!
21
abr.
Prepagos en Teusaquillo
Ubicada en el Centro-occidente de la ciudad de Bogotá se encuentra una localidad conocida como Teusaquillo. Aquí puedes disfrutar de una visita al parque Simón Bolívar, caminar por la ciudadela de la Universidad Nacional y, ¿por qué no?, pasar una fogosa noche enredado en las piernas de una prepago.