Escort Prepago Daniela
Posada
Hola soy Daniela Posada una chica prepago de 18 años de edad en Bogotá. Soy blanca, de cabello negro y ojos oscuros. Soy nueva en esto y no tengo demasiada experiencia, pero coopero bien y no soy sangrona.
Me gustan los besos y a mi cuerpo las caricias no lo pienses mas solo llama estoy disponible.
Fotos Reales, sin photo shop y si no, No Pagas nada.
Edad | 18 |
Color de piel | Blanca |
Tamaño de busto | A |
Tamaño de cola | Grande |
Contextura | Delgada |
Estatura | 160 CM |
Ubicación | BOGOTÁ |
Color de ojos | OSCUROS |
Color de pelo | NEGRO |
Idiomas | español |
Intereses | lectura, cine, musica |
Comida | mexicana |
Bebidas | cerveza y cocteles dulces |
Estilo de ropa | casual |
Cirugías estéticas | Ninguna |
Servicios adicionales | Anal,Oral Natural |
1 Hora
COP 260,000.00
2 Horas
COP 420,000.00
5 Horas
COP 700,000.00
Medio de Pago:
Llama o escribeme, la pasaremos delicioso (Telegram, Whatsapp) -> (+57)| 305-333-9946|
Más perfiles:
27
sep.
Novia prepago, realidad o ficción?
Uno de los principales objetivos de las escorts o chichas prepagos es satisfacer al máximo no sólo las necesidades básicas de sus clientes, sino también y en especial sus fantasías más deseadas. Sin embargo, hay una de esas fantasías que, aunque bastante común, muy rara vez (por no decir nunca) se hace realidad ...
30
may.
Sugar Baby & Sugar Daddy en Bogotá
Hoy en día a cobrado mucho interés las relaciones de sugar baby / sugar daddy. Ahora bien preguntémonos en qué consiste esto?, una relación de este tipo comprende 2 personas que obtienen un beneficio de la otra, por un lado tenemos a la sugar baby quien necesita ser consentida o pagar sus obligaciones y necesita del sugar daddy que le ayude, el sugar daddy a cambio obtiene afecto, cariño, una relación amorosa donde también obtiene por supuesto placer, sexo del bueno, sexo rejuvenecedor para este sugar daddy
08
nov.
Prepagos en Barranquilla
Hace un par de semanas me estaba asfixiando en mi rutina. El trabajo me estaba consumiendo y mi círculo me parecía un fastidio. Necesitaba escaparme un fin de semana. Sabía lo que quería. En búsqueda de diversión, sensualidad y calor, hice una maleta pequeña, metí mis guayaberas y tomé el primer avión que encontré para Barranquilla. ¿Por qué? Porque sí. Hace tiempo tenía ganas de conocerla y ahora podía, y además lo necesitaba.